Tips para controlar el consumo de azúcar en los peques 

El verano es época de desenfreno, sobretodo por los peques, que muchos de ellos ven como se desboca el consumo de azúcar en comidas, gracias a chuches, helados, bebidas refrescantes y demás. Desde el blog de La cestita del Bebé os vamos a dar unos prácticos consejos para su control. 

No es ningún secreto que a los niños les encantan los dulces. Mientras que los adultos estamos acostumbrados a añadir ciertos alimentos a nuestra dieta, para los niños el azúcar crea un aditivo tal que puede convertirse en un antojo incontrolable. Comer demasiada azúcar es más perjudicial para los niños que para los adultos. 

 Durante esta fase de crecimiento, cualquier factor nutricional afectará a su correcto desarrollo y también propiciará la formación y mantenimiento de determinados hábitos en el futuro. ¿Cómo pueden los padres controlar el consumo excesivo de azúcar de sus hijos? ¿Existen alternativas saludables que realmente disfrutarán y les permitirán seguir disfrutando de sus sabores favoritos? En esta guía de alimentación y salud te contamos las consecuencias de comer mucha azúcar en la infancia, cómo afecta a los niños y cómo controlar la adición.  

Presta atención a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y aplícalas en tu día a día para que toda la familia se alimente adecuadamente.  

Cómo afecta el exceso de azúcar a los niños 

El azúcar es un nutriente natural en los alimentos. Sin embargo, no lo encontramos en la naturaleza en una concentración tan alta como en los alimentos dulces que comemos hoy en día. Los dulces, tartas, refrescos y otros derivados del azúcar son potencialmente peligrosos para la salud. 

Cuando consumimos alimentos ricos en azúcar, nuestros niveles de azúcar en sangre aumentan. Un nivel normal de azúcar en sangre, llamado glucemia, no debe ser superior a 72 a 100 mg/dL para evitar efectos adversos para la salud.  

Si los niños (y los adultos) consumen mucha azúcar en su dieta, su nivel de azúcar en sangre siempre será más alto de lo normal. Con el tiempo, una persona puede desarrollar diabetes, lo que puede tener efectos devastadores para la salud. 

Valores superiores a 125 mg/dl pueden provocar diversos niveles de daño en el organismo. Hoy en día, la incidencia de diabetes en los niños ha aumentado significativamente y el riesgo sigue aumentando. Todo porque los niños pequeños tienen fácil acceso a alimentos azucarados que les encantan y a los que no pueden resistirse.  

Alimentos y bebidas ricos en azúcar 

Aunque es normal consumir algo de azúcar en la dieta, que se produce de forma natural en alimentos como frutas, verduras o cereales, el azúcar en la dieta de los niños proviene principalmente de alimentos procesados. 

Sin que lo sepamos, los padres alimentan a sus hijos con alimentos que realmente les gustan, pero les dan más azúcar de la que deberían. Entre ellos se incluyen cereales, galletas, muffins, tartas, helados, golosinas y refrescos o dulces. 

Pero incluso algunos alimentos que consideramos «saludables» no lo son. Los jugos, incluso los naturales, la miel y otros productos con alto contenido de azúcar pueden elevar el nivel de azúcar en la sangre y aumentar la resistencia a la insulina. 

Estos azúcares en los alimentos afectan gradualmente a los niños. Además de aportar una gran cantidad de energía, lo que puede provocar problemas de sobrepeso u obesidad en los niños, el deterioro metabólico se observa cada vez más en los niños. 

Síntomas de niveles altos de azúcar en sangre 

¿Cómo saber si el nivel de azúcar en sangre de su hijo es demasiado alto? Hay síntomas muy evidentes, especialmente en niños y más pronunciados que en adultos. Entre ellos, podemos destacar los siguientes puntos: 

  • Aumento de la sed 
  • Quiere orinar más 
  • Aumento del hambre 
  • Pérdida de peso repentina 
  • Fatiga excesiva 

Estos síntomas corresponden a los síntomas de la diabetes, pero no son necesariamente una enfermedad si se presentan en niños. Actuar rápidamente cuando aparecen síntomas de niveles altos de azúcar en sangre puede prevenir problemas metabólicos importantes en los niños.  

Cómo controlar el consumo de azúcar en los niños 

Para que los niños no sufran hiperglucemia o niveles elevados de azúcar, el control nutricional es muy importante. No se trata de demonizar el azúcar, sino de un consumo responsable y consciente del mismo, porque sabemos que este nutriente, aunque alcalino, puede tener un efecto muy negativo para la salud.  

El azúcar es necesario en la dieta porque es la principal fuente de energía para el cerebro y algunos otros tejidos y órganos del cuerpo. En lugar de recurrir a los azúcares simples, los nutricionistas infantiles recomiendan comer azúcares complejos, que se encuentran en alimentos integrales en lugar de alimentos procesados. A veces ni siquiera sabemos que el azúcar libre o simple se esconde en muchos alimentos. Se presentan como ingredientes que no se detectan fácilmente, como: jarabe, glucosa, sacarosa, galactosa, fructosa, melaza o néctar. ¡Ten mucho cuidado con ellos! 

Cada vez hay más en el mercado papillas para bebés que los contienen. Fíjate en zumos, yogures, panes, batidos, refrescos, incluso zumos de frutas y dulces etiquetados como “naturales”. Puede que no sean tan saludables como parecen. 

Consejos para reducir el consumo de azúcar en los niños 

Según las recomendaciones, los niños menores de 2 años no deben consumir ningún tipo de azúcar. A estas edades, los azúcares naturales de los alimentos son más que suficientes para un desarrollo y crecimiento normal. 

El desarrollo paulatino del gusto en los niños de entre 2 y 6 años es una etapa crítica para que se acostumbren a comer dulces. Procura no comer en casa ni fuera, y cuida la nutrición de toda la familia. 

La forma más eficaz para los niños es darles un buen ejemplo. Como adulto, probablemente te hayas vuelto un poco adicto al azúcar estos días, y eso es totalmente normal. Pero vigile la dieta de su hijo, ya que aún así puede evitar comer dulces con demasiada frecuencia. 

Alternativas al azúcar en la dieta infantil 

Como ya hemos comentado, la mejor solución para que los niños sigan disfrutando de sus dulces favoritos es centrarse en los alimentos integrales. Las frutas, los cereales y otros alimentos que contienen azúcar de forma natural son igual de deliciosos y pueden «satisfacer» a los golosos. ¿Qué pasa con los edulcorantes y otros azúcares con propiedades saludables? Aunque nos dicen que el azúcar moreno, la miel, el azúcar moreno y otros derivados del azúcar son más saludables, no dejan de ser azúcares simples y también pueden elevar los niveles de azúcar en sangre. No debes abusar de ellos.  

En cuanto a los edulcorantes artificiales como la sacarina, el eritritol, el acesulfamo potásico, el aspartamo e incluso la stevia, no son los mejores sustitutos del azúcar en la dieta infantil. Claro, pueden ser una solución única, pero nunca deben usarse regularmente. Las investigaciones muestran que, si bien ayudan a frenar el consumo de azúcar en los niños, aún crean una fuerte necesidad de dulces a nivel psicológico, que puede crecer de manera negativa con el tiempo. 

Esperando que el artículo no os haya resultado demasiado dulce nos despedimos, cuidaros mucho y nos leemos en la próxima ocasión! 

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