El embarazo es una gran etapa para una mujer, pero en la que se debe cuidar mucho la alimentación. Hoy desde el blog de La Cestita del Bebé vamos a ver si es recomendable tomar bacon durante el embarazo.
Uno de los elementos clave en la mayoría de los desayunos es el tocino, que también se le conoce como panceta. La inquietud de muchas mujeres embarazadas surge al no estar seguras si es seguro consumir tocino durante el embarazo o si podría haber algún riesgo asociado.
Durante el embarazo, es crucial mantener una alimentación que sea lo más saludable y equilibrada posible. A pesar de la creencia de que “hay que comer por dos”, actualmente sabemos que es necesario controlar el peso para evitar aumentar más de lo recomendable, gestionando la cantidad de calorías y los alimentos que ingerimos.
Por otro lado, hay ciertos alimentos que se deben evitar durante el embarazo. Ejemplos de estos son el jamón curado, el pescado crudo y algunos tipos de mariscos, los cuales forman parte de las restricciones para las gestantes. ¿Y en cuanto al tocino?
Siendo un tipo de embutido, el tocino presenta algunas restricciones dentro de la alimentación de las mujeres embarazadas. Con esta completa guía orientada a futuras mamás, exploraremos las sugerencias para consumir tocino, cómo se debe preparar, y cuál es la cantidad adecuada.
¿Es seguro consumir tocino durante el embarazo?
El tocino y la panceta son carnes de origen animal, muy ricas en proteínas, además de contener una alta cantidad de grasas. Estos pueden ser incluidos en la dieta de una mujer embarazada sin peligro, siempre que estén bien cocidos.
Si decides consumirlo ocasionalmente y dentro de una dieta variada, lo ideal es elegir carne de cerdo de alta calidad. Busca un tocino que sea natural y ecológico, que cuente con la certificación correspondiente.
Al igual que otros productos embutidos, es común que el tocino envasado tenga un alto contenido de sal y conservantes. Esto se hace para prolongar su vida útil en el refrigerador, pero puede ser perjudicial para la salud de quienes lo consumen.
Cuando el tocino es de excelente calidad, procediendo de cerdos que han sido criados en buen estado y alimentados adecuadamente, su contenido de grasa es más saludable. Contiene una mayor cantidad de ácidos grasos omega-3 en comparación con los ácidos grasos saturados, que son menos beneficiosos durante el embarazo.
¿Qué sucede si consumo tocino durante el embarazo?
Es común experimentar ciertos antojos durante el embarazo. Muchas mujeres sienten de repente un deseo fuerte por alimentos que no suelen comer con frecuencia, ¡y se les hace difícil resistir!
Si tienes ganas de comer tocino durante tu embarazo, siéntete libre de hacerlo. No hay riesgos para ti ni para tu bebé, siempre y cuando el tocino o panceta esté bien cocinado.
Sin embargo, debes cuidar la cantidad que consumes y evitar comerlo crudo o ligeramente cocido. Estas son las dos consideraciones que debes tener presentes.
La panceta se distingue un poco del beicon ya que puede estar disponible fresca para consumir directamente, curada en sal o sometida a un proceso de ahumado. Esta alternativa no es segura, y hay un peligro de toxoinfección si se consume sin haberla cocinado antes.
Riesgos de consumir tocino durante el embarazo
Aunque la ingesta de panceta, tocino o bacon no está prohibida durante el embarazo, hay ciertos aspectos que debemos tener presentes. Estos ya los hemos mencionado antes, pero deseamos explicarlos para que conozcas los riesgos asociados.
Uno de los problemas es la ingesta de bacon crudo, ya que puede ser un alimento que propague enfermedades. También está el hecho de que tiene un alto contenido de grasas y ofrece muchas calorías.
La Toxoplasmosis y listeriosis
Los productos cárnicos en el embarazo son considerados inseguros o deben consumirse con moderación, dado que su proceso de curación no garantiza la eliminación de patógenos. Aunque estos patógenos suelen ser inofensivos para la mayoría de las personas, no sucede lo mismo con las mujeres embarazadas.
Durante el embarazo, el sistema immunológico está debilitado y no puede combatir infecciones de manera eficaz. Esto aumenta la exposición a diferentes virus, bacterias y parásitos, muchos de los cuales se encuentran en los alimentos que consumimos.
Los más peligrosos, no tanto para la madre sino para el feto, son el parásito Toxoplasma gondii y la bacteria Listeria Monocytogenes. Estos microorganismos están presentes en el entorno y en los alimentos y causan las infecciones llamadas toxoplasmosis y listeriosis.
Por esta razón, es importante evitar el consumo de carnes crudas, embutidos, quesos no pasteurizados, huevos que no estén completamente cocidos o verduras que no estén limpias. De igual forma, la panceta que esté poco cocinada o ahumada puede causar intoxicación.
Control de grasas
Es esencial manejar adecuadamente la cantidad de grasas durante el embarazo. En realidad, todas las personas deben ser conscientes de las calorías y de los tipos de grasas que consumen. Sin embargo, durante el embarazo se debe tener un cuidado especial.
La grasa es un nutriente vital para el correcto funcionamiento del cuerpo y la formación de tejidos. Durante la gestación, es crucial obtener lípidos de buena calidad, evitando las denominadas ‘grasas dañinas’.
Se puede incluir panceta que sea rica en ácidos grasos omega 3 ocasionalmente en la dieta. Es recomendable seleccionar opciones de mejor calidad y que no contengan conservantes perjudiciales, ya que no aportan beneficios.
El consumo de grasas trans y un alto nivel de ácidos grasos saturados pueden incrementar el riesgo de desarrollar trastornos metabólicos como la diabetes, afectando no solo a la madre, sino también al bebé a medida que crece y se desarrolla después del nacimiento.
Cómo consumir tocino de manera segura durante el embarazo
Si deseas incluir panceta en tu dieta durante el embarazo, hazlo de manera adecuada. Selecciona un buen trozo de bacon, preferiblemente de producción ecológica y sostenible, que esté fresco y libre de conservantes.
Este producto puede ser cortado en rodajas, tiras o cubos para facilitar su cocción. Nunca lo consumas sin cocinar. Durante el embarazo, es necesario que el tocino se prepare siempre.
Puedes cocinarlo en la sartén, a la parrilla con un poco de aceite de oliva, en su grasa, al horno para dorarlo, a la barbacoa, o incorporarlo a una pizza antes de hornearlo. El tocino cocido o el que se agrega a un guiso es otra opción deliciosa, que añade sabor y nutrientes a cualquier platillo.
Consúmelo máximo una o dos veces a la semana, a menos que tu médico o nutricionista te aconseje lo contrario. Es fundamental no excederse con la panceta o el tocino durante el embarazo, y mantener una dieta equilibrada que incluya una variedad de alimentos para asegurar un buen aporte nutricional.