Con el verano llamando a la puerta y con el COVID en mínimos se prevé un verano más normal que el anterior. En verano los embarazos se hacen más pesados y en algunos casos se recomienda tomar paracetamol. Hoy desde La Cestita del Bebé vamos a hablar de un recién estudio que habla de los efectos secundarios de este fármaco en el embarazo que hemos leído recientemente.
Como en todo lo mejor es no abusar de ningún fármaco y menos durante el embarazo. El estudio que os presentamos a continuación se basa en el seguimiento de más de 73.000 niños y niñas de diversos países europeos. La muestra común es que se relacionan una serie de trastornos neurológicos con el uso de uno de los mayores analgésicos consumidos en el país.
El estudio mencionado viene publicado por el European Journal of Epidemioligy en este enlace. Para centrarnos en los resultados del estudio debemos entender primero los datos, que se engloban dentro de 6 grupos diferentes de Europa (Dinamarca, Países Bajos, Italia, Reino Unido, Grecia y España). Para obtener los datos del estudio se han llevado un seguimiento de todos estos niños y niñas desde que han estado en el vientre materno hasta los primeros años de vida.
Tras los estudios los resultados muestran que los niños y niñas cuyas madres tomaron paracetamol durante el embarazo tenían un 19% más de probabilidades de desarrollar trastornos del espectro autista (TEA) e incluso un 21% más de trastornos de déficit de atención (TDAH) que bebés y niños no expuestos al fármaco en la gestación.
Los resultados del estudio no prueban que el riesgo sea absoluto, es decir, que aunque lo tomes de manera ocasional no tienen por qué producir estos efectos en los niños. Pero que aunque no deba suprimirse su uso en embarazadas y niños, sólo se debe tomar en situaciones que así lo necesiten y sin abusar.
Para la consecución del estudio y ver la relación entre el consumo de este popular analgésico y los trastornos en los niños, se han tenido en cuenta diversos factores y entre ellos la dosis tomada de este medicina, con el uso esporádico hasta casos con uso continuado.
Se ha llevado a cabo por el instituto de salud global de Barcelona (ISGlobal), en la ayuda la Fundación La Caixa. La conclusión obtenida es clara, y como intuíamos a mayor dosis mayores probabilidades de efectos negativos.
En el estudio también se han considerado otras variables que pueden ayudar con la aparición del TDAH o TEA. «Se miraron características de la madre, de los niños o que un niño pudiera tener más riesgo de sufrir TEA o TDAH», como por ejemplo el caso de que tuviera un hermano afectado. «Se tuvieron en cuenta para corregir los resultados y ver que estos no fueran efecto de una de estas otras variables», explica Avella. También se preguntó por el motivo por el que la madre tomaba paracetamol: «había que saber si lo que influye es la fiebre o el paracetamol que te tomas para la fiebre. Los resultados que vemos son los resultados corregidos teniendo esto en cuenta».
Muy poco estudios sobre los efectos adversos
Siendo uno de los fármacos más usados y comunes es un poco paradójico que no haya tantos estudios al nivel de su uso. El paracetamol es el cuarto medicamento más vendido en España y el tercero entre los analgésicos. Para este tipo de medicinas es necesaria una receta médica siempre que las dosis sean igual o superiores a 1 gramo por toma. Pero para las dosis más comunes que son inferiores a esta cantidad no es necesaria ningún tipo de receta y se tiende a usarse para calmar pequeños dolores sin mucho control.
Entre las madres que participaron en el estudio hasta un 50% había llegado a tomar paracetamol en alguna ocasión durante el embarazo.
Aun siendo un medicamento que se usa de forma tan ligera y es muy común, su vínculo con las diferentes patologías como hiperactividad, déficit de atención y trastornos relacionados con el autismo resulta que hay pocos estudios.
La mayoría de estudios que se realizan con fármacos y médicos se centran en los efectos físicos y anatómicos que puedan derivar en cambios, pero no se tienen en cuenta aspectos mentales que derivan en la funcionalidad para el desempeño diario. En lo últimos años, gracias a un mayor avance y estudio de la ciencia se están diagnosticando más trastornos de conducta en niños y niñas pequeños como hiperactividad, déficit de atención y problemas relacionados con el autismo, llegando a afectar a hasta un 5% de la población infantil y que dan síntomas antes de los 7 años.
No son datos sencillos de digerir, ya que las estadísticas dicen que existe al menos 1 caso entre cada 100 nacimientos con alguna de estas patologías y que en su mayoría no son diagnosticados ni tratados con toda la atención que se debe en el espectro autista. Por eso, la recomendación es que siempre antes de tomar un medicamente lo consultéis con vuestro médico de cabecera y no abuséis y menos en caso de estar embaraza.
Nos ha parecido interesante elaborar este artículo con la información de estos recientes estudios, esperando que os sirva de toda la ayuda posible. Antes de iros os recordamos que seguimos trabajando en nuestros detalles de boda, bautizo y comunión y preparando nuevos regalos para embarazadas y celebraciones tipo baby shower que se podrán ir celebrando conforme lleguemos a la nueva normalidad. Cuidaros mucho y nos leemos en la próxima!